Jorge Zepeda Araya

Esta es la pregunta que se hacen todos, ¿Qué le pasó a Chile?, periodistas y opinólogos no pueden creer que hayamos cambiado tanto de un día para otro, como si alguna vez hubiéramos sido el país de gente cuerda y de espíritu republicano, como si hubiéramos sido en el pasado inmediato un país de gente tan culta y educada, que producíamos la envidia del vecindario latinoamericano. Somos un país con un extraño carácter y creo que eso ha atravesado la historia de nuestra cultura, a lo menos desde que yo tengo uso de la razón. Siempre hemos vivido en el conflicto, siempre en los límites de la crisis, tal es así que nos acostumbramos a las adversidades, a los terremotos, los aluviones, a perder los campeonatos de fútbol en el último minuto, a lidiar con el IPC, endeudados hasta extremos y limites increíbles, pero felices con el capitalismo profundo en el cual estamos inmersos, el de cumpla sus sueños con cuotas mensuales que se comen la mitad de su sueldo. Para mayor abundamiento somos basta